Luis “Titín” Encina, profesor del Club de Golf de Papudo desde hace 25 años, enseña a los niños y jóvenes del pueblo de forma gratuita a través de un programa al que pueden acceder estudiantes de los colegios municipales de esta comuna donde viven alrededor de 6.200 personas.

“Acá el golf es más popular que el fútbol, eso no ocurre en ninguna otra parte. Esta es una cancha de lujo. Y lo más lindo es lo que se puede hacer con la gente del pueblo. Yo me las tengo que dar de psicólogo, preparador físico y entrenador, con los chicos de la escuelita. El golf es un deporte que nunca se termina de aprender”, comenta el profesor Luis.

Encina, es parte de una numerosa familia de la localidad que incluye al campeón Guillermo Encina, su hija Valentina también campeona de la localidad en varias categorías junior y su abuelo, el primer administrador del Club que fue fundado en 1932.

“Titín” quien imparte clases los martes, miércoles y jueves a las 15:00 horas, cuenta con cuatro alumnos en este horario que van entre los 10 y 14 años, dos de ellos de apellido Encina.

Dentro de este grupo de estudiantes, está la joven Alison Allendes de 16 años estudiante del Liceo de Papudo y con grandes aspiraciones para convertirse en profesional. Alison, está esperando su hándicap otorgado por la FChG uno de los principales requisitos para inscribirse en los campeonatos de golf.

Alison, siempre ha jugado golf a pesar de también ser aficionada al fútbol, una lesión la alejó de este último llevándola a tomar un palo “En el verano recibí una noticia buenísima. El papá de Joaquín Niemann me va a apadrinar a través de su fundación. Desde que me avisaron he venido a jugar todos los días. Estoy motivadísima”, expresó Allendes.

Un Club comprometido

El actual administrador del Club de Golf de Papudo, Aníbal Reinoso, también es una figura local quien presidió a su padre Juan Reinoso 12 años después.

“Soy nacido y criado en Papudo, y vengo de una familia golfista. Estudié mi enseñanza básica y media aquí porque me gustaba mucho jugar golf y no quería perder tiempo viajando. Desde niño salía de clases, agarraba mis palos y me venía a jugar”, cuenta Aníbal.

Aníbal, también fue campeón nacional en la categoría infantil cuando tenía 13 años, prejuvenil a los 15 y juvenil a los 17. Además, compitió en la Copa Los Andes, uno de los campeonatos más prestigiosos a nivel sudamericano compartiendo equipo con Guillermo “Mito” Pereira.

Una llamada del presidente de Golf Action sorprende a Aníbal, quien recibe la buena noticia que en esta temporada tres alumnos de la escuelita podrán competir en los torneos sin ser miembros y solo pagando la inscripción.

Aníbal, tuvo la oportunidad de jugar con Niemann y Pereira en Golf Action a quienes les agradece por ser unas figuras que han influido en la masificación del deporte, beneficiando a abrir más puertas.

El administrador, cuenta cómo han aumentado hasta 10 veces la cantidad de solicitudes de hándicap a la Federación solo este año.

“Papudo ha sido cuna de grandes golfistas, ahora estamos con el semillero algo stand by pero tengo harta fe en los que vienen”, afirma. Hasta ahora, el transporte para que los alumnos puedan trasladarse a Santiago – Viña del Mar o donde haya campeonato, es proporcionado por el Municipio de Papudo.

Alison es una de sus fichas, otro es Iker Godoy (8). En total, la escuelita cuenta con 18 alumnos de distintas edades, de los cuales, unos seis de ellos se están preparando para competir. Destacando a Alison Allendes e Iker Gogoy quienes son una de sus fichas.

“El apoyo del Club lo tienen y ellos lo saben, no están remando solos”, expresó Aníbal, pensando también en su propia historia.

Una Filial destacable

El Club va a cumplir 90 años y la cancha, de 36 hectáreas, fue una cesión de tierras de la familia Irarrázaval a un grupo de golfistas con el requisito que sus puertas siempre estuvieran abiertas para la comunidad.  

Fue en 1978 cuando se creó la Filial de Golf de Papudo, una organización de vecinos amantes del golf que hace una década se constituyó legalmente con personalidad jurídica y que hoy suma 120 socios, unos 80 de ellos activos practicando el deporte regularmente.

Tienen el club abierto para jugar los miércoles, jueves y domingos, y deben pagar mil pesos por jugar, dinero que se va a la recaudación interna de la asociación.

Los integrantes tienen varios oficios, desde pescadores, albañiles, carniceros, taxistas, funcionarios públicos, entre otros. 

Sergio Díaz Sandoval quien fue presidente durante 20 años y también uno de sus fundadores, trabajó en el rubro de la construcción y además fue caddie todos los fines de semana durante 40 años.

Christian Palacios Lillo es el presidente de la Filial hace 15 años y funcionario municipal.

“Es lo que nos distingue, no hay diferencias de clases. Es un lugar de encuentro. Como una gran familia. Dos o tres veces al año hacemos un torneo los miembros de la Filial versus los socios, y después organizamos asados en alguna casa”, afirman Palacios y Díaz, ambos miembros de la Flilial, mientras visualizan una obra en la costanera del balneario.

Guillermo Encina, Emilio Palacios y Anisio Araya, son las figuras papudanas de la Filial, reconociendo que están en deuda con las mujeres, pero esperando que esto cambie con las futuras generaciones.

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Fuente: Diario Financiero